Noticiero ecológico de
Albaeco, Suecia
Dr. Fredrik Moberg, Editor
PRINCIPAL:
<< Valoración de la Naturaleza y naturaleza
de la valoración
EN BREVE:
Receta para la administración de la elasticidad
La gobernación medio-ambiental para la gente y los ecosistemas, con paridad
VALORACION DE LA NATURALEZA Y NATURALEZA DE LA VALORACION
Muchos de los servicios de la Naturaleza son verdaderamente sin precio — no podemos vivir sin ellos ni se conoce ningún sustituto. "Valorar" estos servicios puede resultar en la concetración de la atención en la importancia de los ecosistemas sanos, para el desarrollo sostenible y el alivio de la pobreza. ¿Pero qué se esconde detrás del precio?
La polenación, por ejemplo, que llevan a cabo las mariposas aproxima 400 mil millones de dólares (USD) por año.
Los ecosistemas del mundo proporcionan una corriente de servicios vitales, como la generación de tierras fértiles, la purificación del agua y del aire, la moderación del diluvio y de la sequía, la polenación y el control de parásitos. La economía global se quebraría si faltara este "capital natural". En este sentido, el valor de los servicios naturales es infinito — simplemente es imposible vivir sin ellos. Desafortunadamente, "infinito" se vuelve "cero" en los cálculos económicos que guían decisiones sobre uso terrenal y reglas oficiales. En este respecto, la sociedad humana asigna valores a la Naturaleza cada vez que se decide un asunto de uso terrenal, a pesar de lo que prefiriéramos creer.
Acertar bien los precios
Los servicios de un ecosistema pueden valer aún más que sus
productos. Por ejemplo, el valor de servicios silvestres, como la moderación
del diluvio, reciclaje de las lluvias, la ingestión del dióxido
de carbono, puede superar por varias veces el valor de su cosecha de madera.
Así que, aun si gana la industria de madera cortando el bosque entero,
puede traer costos grandes para la sociedad en general. Esto lo llaman "fracaso
del mercado" los economistas, porque los precios no representan ni el
costo ni el beneficio social completo de un servicio o de un producto. Otro
ejemplo es el precio de la gasolina, que no refleja el costo posterior de
las emisiones.
Por eso, muchos proponen que el valor de servicios ecosistemáticos tienen que incorporarse a los precios del mercado, para que las naciones puedan tomar decisiones económicas racionales y ecológicamente sostenibles. Este asunto es de importe especial para los países en desarrollo, porque la gente pobre en general depende más directamente de los beneficios que producen los sistemas naturales locales y se encuentran más vulnerables a los efectos de una amenaza al medio ambiente...
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EN BREVE:
RECETA PARA LA ADMINISTRACION DE LA ELASTICIDAD
La elasticidad es la capacidad de un ecosistema de navegar trastornos (como tempestades, incendios y contaminantes) sin cambiar de estado de manera profunda y característica (véase SDU 2, 2002). Las ediciones anteriores de SDU describen los fuertes nexos entre la elasticidad, la diversidad y el uso sostenible de los productos y servicios de un ecosistema. Esta elasticidad es de importancia especial para la gente pobre, que tiene pocas posibilidades, si no ninguna, de comidas o de ingresos alternativos en el caso de que fracasen los servicios o los productos ecosistémicos. Donde la gestión más corriente de recursos en Occidente se apunta sólo a una especie, o unas cuantas, del ecosistema, la teoría de la elasticidad favorece el manejo de sistemas naturales enteros y la humanidad como "sistemas socio-ecológicos". Pero, ¿qué es la elasticidad, en su funcionamiento? ¿Quién puede identificarla, y cómo?
En un artículo reciente, el profesor Brian Walker, con unos colegas de la Resilience Alliance, proponen una estrategia de gestión de la elasticidad. Ofrecen ejemplos de cómo la colaboración entre investigadores, gerentes de agencia y participantes interesados, ha servido para identificar la elasticidad y usarla en la práctica para administrar ecosistemas. Su receta para la administración de la elasticidad (véase la caja) es un proceso incremental para identificar los asuntos claves, los límites y los participantes interesados, desarrollar circunstancias y modelos de varios resultados, y para evaluar las consecuencias. La estrategia favorece una colaboración entre científicos, administradores y usuarios locales.
Cecilia Holmlund
Enlaces relacionados:
Walker, B. and others. 2002. "Resilience management
in social-ecological systems: a working hypothesis for a participatory approach."
Conservation Ecology 16(1), available online at: www.consecol.org/vol6/iss1/art14/main.htm
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LA GOBERNACION MEDIO-AMBIENTAL PARA LA GENTE Y LOS ECOSISTEMAS, CON PARIDAD
El Instituto de Recursos Mundiales (WRI)—junto con el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Banco Mundial—ha publicado un resumen de su informe Recursos Mundiales 2002-2004. El tema del informe de este año es la "gobernación medio-ambiental"—cómo se toman las decisiones acerca del medio ambiente, y por quién.
El enfoque es la gobernación sostenible para "emparejar la necesidad humana con la capacidad biológica de la Tierra, con paridad y equilibrio." El informe sugiere cómo potenciar el público y aumentar su participación, especialmente los grupos indígenas y la gente pobre que suelen verse despojados de derechos de propiedad y de poder de negociación. Un estilo ecosistémico de gobernación medio-ambiental se sugiere para representar los intereses de las comunidades interesadas y de los ecosistemas en sí.
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